viernes, 10 de octubre de 2008

En todos los lugares me siento un habitante más...PAMPLONA

... Lo confieso. Hago trampas. Porque siendo puristas, apelando únicamente a la realidad, siendo preciso con los contenidos de este blog, Pamplona no debería figurar. Apenas viví. Apenas fueron unas semanas de mi vida, no llegaron a quince días seguidos, pero si se trata de decir dónde estuve y me sentí feliz en algún momento... cómo olvidarme de Pamplona.
Cómo olvidar los amaneceres en Mezkiritz, pueblo perdido entre bosques y brumas, donde tenías por sus calles la mejor banda sonora, vacas, caballos, pájaros, silencio, donde salir a pasear era un encuentro tan brutal con uno mismo, donde se sentía la paz a cada paso...
Cómo olvidar el cariño de la familia ALASTRUEY, que nos acogió a todos los miembros del rodaje como si fuéramos sus hijos. Admiro mucho a las personas que te hacen sentir especial a su lado, es difícil recibir amor por nada en este mundo hoy en día, y allí nos llevamos una lección magistral de todo esto.
Pero no sólo fue bucolicidad. También en Pamplona ciudad hice mis pinitos, demasiados quizá. Tantas noches de horas y horas de rodaje hicieron mella en nuestros saturados cerebros. Seres tan extraños como GORKANAL, ÁNDER DEL ANO, EDURNE SAN FECAL y su mentor, quien os escribe, hicieron las delicias de la noche pamplonesa. Entre las personas que te hacen sentir especial, debo también incluir a la gran AORTA, la chica más guapa del rodaje, en quién pensaba yo cuando me desperté emocionado cuando el perro de GORKA me lamía los pezones con sensualidad...
Estoy contento. Vuelvo a Pamplona la semana que viene. Doblaré la última secuencia que falta... eso quiere decir que a LODO cada vez le queda menos para ver la luz. El sueño será realidad. Os mantendré informados...



jueves, 9 de octubre de 2008

En todos los lugares me siento un habitante más...VALLADOLID

... Sólo fue un mes, pero sé que en la ciudad aún me echan de menos. Los distribuidores de ginebra que operan por Castilla todavía no se han recuperado de mi marcha, tampoco lo lleva bien el dueño de cierto bar y su novio que, noche sí, noche también, se ofrecían a acompañarse a su casa para después los tres unidos hacer las delicias de nuestros anos...
Como yo tampoco he olvidado las comilonas en Castromonte después de ensayar, donde PAULA hacía para comer, vengan uno vengas diez, donde las sobremesas y las siestas eran demasiado cortas, o por lo menos así lo parecían, siempre quedabas con ganas de más...

Al final Pucela se me quedó como una de las ciudades más gratas de cuantas he estado. Todavía me gusta perderme de vez en cuando por allí y llevar mis pies hacia el barrio de la Antigua, piedra y mármol blanco, degustar unas buenas tapas (mejores gracias al Ribera del Duero), o simplemente perderme (ciudad más caótica no he visto) por sus calles, o sentarme a leer o a nada, un otoño en el Campo Grande, ahora que las hojas pasan más tiempo en el suelo que en las copas de los árboles.

Cada vez que vuelvo a una ciudad en la que he vivido siento un algo especial, una sensación extraña, me invaden mucho los recuerdos, y en Valladolid me pasa bastante más. Supongo que porque fue la primera a la que llegué ya a ganarme la vida como actor, y eso marca también. Fue el inicio de un a lista que espero que sea larga, larguísima. Pero siempre tendrá su lugar...

miércoles, 8 de octubre de 2008

En todos los lugares me siento un habitante más... SABADELL. BARCELONA


... FANY, cariño. Amigos Xipxaperos. Baldufos. Amigos que he ido haciendo por Lleida. Todo se lo debo a una tarde, un atardecer en Montjuic. Me esperaba mi escuela de Madrid para hacer segundo, pero yo ya había echado el ojo a la de Barcelona. Mirando ponerse el sol junto al mar lo pensé... ¿por qué no aquí?
Mi amigo MANUEL tenía una habitación libre en SABADELL. Allí pasé los primeros meses, volaron las botellas de vodka, aparecieron pintadas amenazantes en los ascensores, casi salimos apaleados del Camp Nou (cuando los hermanos MILITO hacían del Zaragoza algo digno de estar orgulloso), las multas por viajar sin billete eran más que una opción... Fue una época muy buena, pero barcelona se ofrecía en el horizonte como una tentación y allí que me fui.
Y me enganchó Barcelona. Hasta el extremo de, acabado el curso, andar buscando excusas, cursillitos, voluntariados, excusas para mantener el piso y no largarme de allí. Cómo abandonar ese piso vetusto en el Poble Sec, las noches de playa y libertad, de bañarme desnudo bajo la luna llena, de merendar queso y cerveza en la Barceloneta. Con frecuencia mi piso se convertía en un cuartel general de amigos y familiares, que dormíamos al estilo tetris para partir el día siguiente en busca de la costa. Volvíamos tres días más tarde, asalvajados, sin habernos duchado, habiendo dormido en la playa, tan felices... Era vida.
Aún vuelvo de vez en cuando. Y debí de portarme bien, porque aún me quedan sitios en los que alojarme, amigos con los que charlar y muchas calles por recorrer.
La echo de menos. No he vuelto a vivir en una ciudad con mar desde entonces, y vaya, como diría ALBERTI ¿o fue MACHADO?, debo de llevarlo tatuado.

martes, 7 de octubre de 2008

Mientras tanto...

... Mientras ando desgranando mis vivencias, mis recuerdos y mis ciudades (supongo que el lector desearía que quien escribe no hubiera salido nunca de casa), deciros que he estado cerca de LYON, concretamente en MONTBRISON, haciendo un Zeppelin, y que Francia es atroz. Que puedes salir con intención de dar una vuelta a las seis de la tarde y a las ocho darte cuenta de que no tienes donde cenar. Me pregunto por qué CANAL PLUS emite en directo a las nueve de la noche un partido de la Liga Francesa. Era mi intención verlo mientras me comía un croque monsieur en cualquier café. El bocadillo me lo comí en la habitación mirando fotos de FANY en la pantalla de mi ordenador.

Recibí la glamourosa visita del señor ALBA DE ALBA a Zaragoza. Una grata visita. Me doy cuenta de lo que me gusta enseñar mi ciudad, su Pilar, sus calles... pero especialmente sus bares. Gente muy maja, sí señor, los que vinieron. Espero que disfrutaran tanto como yo. No sé, lectores, se aproxima el Pilar y nada me gusta tanto como hacer de cicerone...¡¡¡aprovechaos!!! ¿Confirmará el CHINO su presencia? Vuelvo a hacer un cásting para un largometraje. Horas de espera, nervios, y finalmente una toma en la que demostrar tu valía... Y un personaje que tiene un hijo de 13 años, luego o los guionistas han pensado en que tenga un desliz o sí, no puedo creerlo, soy demasiado joven.
Y mientras tanto, la más fabulosa mujer me ha regalado ya medio año de su vida. No los cambio por nada. Cada momento de magia y cada momento de crisis, volvería a vivir contigo exactamente lo mismo si no fuera porque por delante tenemos todavía mucho más que seis meses. Qué quieres que te diga... que te quiero. Y que cómo me dejas sin palabras y aquí sólo caben palabras, pues mejor me voy a dormir. Con suerte sueño contigo esta noche. Como todas...

viernes, 3 de octubre de 2008

En todas las ciudades me siento un habitante más...MADRID

...Hubo una ciudad que mi primo convirtió en atroz. Ciudad a la que fui, me largué, volví, me largaré y volveré. El eterno cruce de caminos en la vida de un actor. Eldorado, que diría REVOLVER.

He vivido dos veces allá. Viví un año seguido. Ocho meses y cuatro alojamientos diferentes. En Madrid uno nunca se puede olvidar de la maleta. Un año de emociones, de madurar, de aprender. De enfrentarme a los primeros castings. A las primeras agencias. De mis primeros éxitos y fracasos.
Malviví. Me levantaba a las ocho, para hacer tu horita y media de transporte público. Llegas a clase, entre caras tristes y tristes andenes. Luchas, compites, te pegas con tus compañeros. Coges un metro. Comes en él. Triste tupper, solitaria paella. Oficina, estrés ruido. Sales de ella y corres por la Gran Vía para llegar al teatro. Actúas. Medianoche. Ni has respirado ni te acuerdas. Sólo queda coger un bus nocturno. Viajar entre suburbios y yonkis y encontrar una cama, parte de una casa que apenas te conoce. Quizá por eso sepan tan bien los buenos momentos.


De mi primer año en la ciudad no hubiera sobrevivido de no ser por PAT. Nunca me cansaré de darte las gracias y espero que disfrutes cuando vuelvas a tu plaza, que creo que la siguen cuidando.

Y de la segunda estancia... la noche y el día. De ángel a demonio. Mi primo, el primo feroz me enseñó otro Madrid. Un Madrid donde los paraguas pueden ser armas mortíferas, donde el ejército del Aire te vigila, donde cualquier regalo puede aparecer en los lugares más insospechados. Un Madrid donde liban un ron celestial, o puedes beber en jodidas macetas, donde se juegan partidos infames a altas horas de la madrugada, primo.



Volveré el año que viene. Será de nuevo mi ciudad. Mi ciudad, y en este caso, la compartiré con una chica maravillosa. Pero el pasado es el pasado y es de muchos de vosotros. Y si no doy ni un nombre es porque no falte nadie. Gracias por hacerme habitar esta locura...

http://es.youtube.com/watch?v=gXs_FYYHPeg

jueves, 2 de octubre de 2008

En todas las ciudades me siento un habitante más... BUENOS AIRES

... En una de las sagas de Regreso al Futuro, le muestran al protagonista una línea que se bifurca en dos direcciones: su vida real, y una vida resultante de haber tomado una decisión concreta diferente en un momento del pasado. Si una ciudad pudo haber hecho que mi vida tomara esa decisión, fue Buenos Aires. Y quizá hoy escribiría de otra manera.
Pero entonces yo aún no apostaba por el Rock & Roll, y los amores imposibles eran sólo eso: amores imposibles. Lo que sí que fue real fue la forma de encandilarme de esta ciudad.

Todas las noches me refugiaba en un café de San Telmo. En una mesa, a oscuras, leía y diseñaba escenas para un espectáculo que estaba creando. Era feliz. Un niñato recién salido de la escuela de teatro estaba de gira por sudamérica. Era bohemio. Era poeta. Era la leche.
Decidí pasear sólo horas y horas por esa ciudad. Todo lo hice solo. Pasear. Salir por la noche. Emborracharme en sus boliches. Sólo. Hasta que inmediatamente después encontraba la compañía de alguien. Hice buenos amigos, compañeros de correrías, la ciudad entera se me mostró compañera.
Fui feliz acariciado por el Tango. Derramé alguna lagrimita en algún bar. Hice amigos, buenos amigos. Como GERARDO, que tantas tardes me invitó a ver a su BOCA del alma, como MARIAH, la dueña del hostal, que me ofreció quedarme gratis cuando las cosas se torcieron... tanta gente que espero que ahora esté feliz.

La prueba de que Buenos Aires es mágica. Antes de irme, mi madre, que había estado varios años atrás, me dio una foto suya con GARDELITO. Uno de los músicos callejeros que llenan de vida el barrio de San Telmo. Pobre mamá, pensé. Allí me lo voy a encontrar. Y allí me lo encontré el primer día que salí a pasear. Pura magia. Espero que aún tenga la foto. Y que él, titiriteros y bailarines sigan creando las mañanas de domingo más mágicas que yo recuerde.

http://es.youtube.com/watch?v=zqLUc86qQts

miércoles, 1 de octubre de 2008

En todas las ciudades me siento un habitante más...TERUEL

... Sé que entre mis lectores existen los amantes del jamón de Teruel. Yo no lo soy mucho (donde esté un buen jabugo se quite lo demás, una cosa es ser aragonés y la otra ser gilipollas), pero sí me gusta mucho Teruel.
Teruel existe, vaya que si existe... Quien no lo crea vaya a comprobarlo en plenas fiestas de la vaquilla. Las he vivido allí. Dudo que exista ciudad con más cerveza corriendo por baldosa cuadrada. Si una ciudad define el espíritu del Aragón Profundo, es Teruel cada verano.

Pero allí que me fui yo. No a vivir esas fiestas, sino a trabajar como actor. Primera vez de algo que con el tiempo se ha repetido periódicamente. Salir de mi ciudad. Teruel acogió a un chavalín, todavía jovencito, con su media melenilla teñida con mechas rubias, que hizo las delicias del público asistente a DINÓPOLIS, disfrazado de dinosaurio.
Fue la primera vez que viví en un piso compartido. Que me tocó limpiarlo. Que chamusqué una tortilla. Que preparé unas lentejas. Empecé a saborear la libertad que años después todavía me acompaña. A gozar de una cerveza en soledad en bares como LA FRONTERA, con su música rokabily.
Recuerdo con cariño aquella competición sexual que nos montamos mis compañeras de piso y yo. No daré nombres, que llevamos todos carrera artística, pero fue espectacular ceder el liderato después de mantenerlo todo el verano en una semana. Ganó a lo ARMSTRONG.
Pasear por Teruel es un placer breve. Se agota enseguida. Pero si podéis, no dejéis de visitar los amantes. Sus torres mudéjares. Su barrio judío. Buscad el torico, si lupa lleváis. Y comed su jamón. No es jabugo. Pero está de puta madre.