domingo, 20 de abril de 2014

ASIER ETXEANDÍA, o MIS OJOS MAQUILLADOS VEN MÁS LEJOS...

... Si tuviera quince años hoy hubiera sido el día más importante de mi vida. Hubiera decidido ser actor... Tengo 35, y esa decisión tomada, y varios escenarios ya a mis espaldas. Lo de hoy ha sido más bien el efecto contrario... con qué moral me vuelvo a subir a un escenario; cómo le explico al público que ha pagado por verme a mí, y no a ASIER ETXEANDÍA...
  Qué maravilla... y no lo digo porque esté resonando todavía el eco de esa frase que, espontáneamente, el público le ha gritado hoy a este vasco, prodigio de la naturaleza. Digo qué maravilla ver a un actor así.
   Y es que, los actores españoles somos minusválidos en mínimo una rama del arte escénico. El que sabe actuar (que ya es un logro) no sabe cantar, y si lo hace va justito de movimientos. O los hay que cantan pero no te interpretan. O que se mueven de maravilla, pero mejor que no abran la boca. Combinaciones hay hasta el infinito, y hasta existen los ni-ni-ni (ni cantan, ni bailan ni interpretan). ASIER hace todo y más.
   En este país de cantantitos y bailarincitas, de mira quien baila y galitas sin gracia, tenemos un animal, un monstruo, un portento, y es que, como diría ASTRUD, hay un hombre en España que lo hace todo...
   Que lo borda todo. Porque no canta. Desgarra. Porque no se mueve. Dibuja en el aire. Y porque no sólo interpreta. Se desnuda. Te entrega su alma en un espectáculo, EL INTERPRETE, personal, único, sincero... Dice que lleva soñando con estar en el teatro desde que era crío... Yo también. De hecho yo también estoy trabajando en un espectáculo personal, que me desnude y me muestre frente al público como él lo ha hecho. Pero mi 66% o más de discapacidades descritas anteriormente van a hacer que lo mío sea muy diferente, ver a ASIER es como contemplar el mito de la caverna de PLATÓN...
   de verdad, creedme, no estoy exagerando. Podría ser este chico un excelente actor, ponerte los pelos de punta cuando canta y moverse de forma impresionante. Ya lo hace. Pero si estoy escribiendo algo es porque tiene un plus más. Entrega. Generosidad. Cercanía.
   Entrega. Han sido dos horas diez minutos de espectáculo. Podía haber hecho una. Al ritmo que lleva, con una se podría haber retirado entre aplausos, dignamente. A los veinte minutos ya sudaba como un pollo. Me parece increíble que mañana vaya a hacer otra función de lo mismo.
   Generosidad. En un momento del espectáculo hace un ejercicio brutal. Con dos gestos atrapa al público, y le hace aplaudir o guardar silencio sólo con un movimiento de manos. Y cuando arrastra la mayor ovación... La dirige hacia la orquesta. La misma entre la que se esconde cuando el público tiene que aplaudir a la chica que le acompaña en cada ciudad. Es el momento de ella y él rehuye el protagonismo.
   Cercanía. Más que cercanía, mismanía, pues se funde, literalmente con el público.

   Recuerdo hace años, cuando hacía una gira de teatro escolar y los chavales nos preguntaban que cómo era eso de ser actor. Les preguntaba a todos si conocían su nombre, y todos decían que no. Acto seguido decía el de dos compañeros de una serie que hacía por aquel entonces y todos les conocían. Yo les decía a los críos que ASIER era el mejor actor de España. Varios años más tarde, me ha dado la razón...