jueves, 28 de octubre de 2010

Pasta circulante (o cómo ve un tonto la crisis)

... Si todo fuera bien, si la economía estuviera boyante, mañana vendería un IPL + CAVITACIÓN. Ganaría 1.500 en el día, cogería a mi chica y me iría a un hotel. Beberíamos champagne en la habitación e iríamos al mejor restaurante.
El camarero del restaurante y el botones del hotel, a la salida del turno, se beberían sus cuantiosas propinas en el bar de JOHN. JOHN, a su vez, animado por el número de clientela, se decidiría a comprar un cartel de neón guapísimo para la entrada.
El rotulista vería que el negocio va bien, y se pillaría otra furgo. El dueño del concesionario podría comprarse esa tele que tanto ansiaba, y el vendedor de la misma haría por fin ese crucero por el Caribe.
El agente de viajes, feliz, se contrata un seguro. Hombre prevenido... Y es la agente de seguros que se lo ha vendido, MARTA, la que estrenará mi aparato con sus preciosas piernas.

Pero como hay crisis, nadie me comprará el IPL mañana...
Pero como nadie me comprará el IPL, seguirá habiendo crisis...

1 comentario:

  1. ... Finalemente, vendí dos aparatos, este mes, pero la desesperación aumenta. Intentaré darme algún lujillo...

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