... Como cada Navidad. Vuelvo a flotar. A dejarme llevar. A sumergirme en un mundo mágico de arpegios y melodías.
Este año he ido solo. Y ha sido una preciosa experiencia. Mi mente volaba, viajaba, mi cuerpo también, a kilómetros de distancia, a las llanuras irlandesas, a campos de batalla, a cumbres nevadas... Y en todos los viajes detenido en un cuerpo, un olor, una mano con la mía.
Como ya dije, Navidad sea renacer, y con un grupo de música tan maravilloso, tan capaz de crear magia en cada segundo, es sencillo.
Crear magia en cada segundo... lo quiero.
domingo, 26 de diciembre de 2010
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... Mira que es hermoso el disco... pero el directo es magia pura
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